28 nov 2011

Estupefacientes

Tus manos, tan frías como el hielo, no te permiten ni coger un simple lápiz. Con todo el cuerpo entumecido, intentas darte calor con una estufa de tres barras y una manta tirada por encima. Con tu imagen verdaderamente cómica, te entra la risa tonta viendo vídeos de risa en el ordenador. El del Sr. Jio es tu preferido, y no dejas de reírte, siempre te hace llorar de la risa. Pero una vocecita en tu cabeza empieza a susurrarte:
- ¿Qué estás haciendo con tu vida?- te preguntó en tono vacilante-.
No le hacías caso, seguías viendo vídeos hasta las tantas de la madrugada, total, no había nada mejor que hacer.
Hasta cuando te fuiste a dormir, intentaste dar respuesta a esa simple pregunta. Intentando dar una respuesta lo más filosófica posible, pero ni eso que se te da bien te sale como esperas.
Drogas, nunca te falta tu tabaco y tu chupito de tequila antes de irte a dormir, así duermes mejor, olvidando lo que has hecho durante el día, y centrándote en conciliar el sueño, tarea imposible por el frío que hace.
Te das cuenta de que necesitas calor, un calor humano, confortable, que te haga sentirte a gusto contigo mismo. Intentas conciliar el sueño, y lo consigues, de momento...

No hay comentarios:

Publicar un comentario